El día de ayer tuve la
oportunidad de asistir a una Charla acerca de las TIC para la gobernabilidad
auspiciada por Global Community , la USAID, la Cooperación Alemana y Claro. Dentro
de las muchas impresiones acerca del poder de las redes sociales y los medios
digitales creo que lo que más me apasiono fue identificarme con un grupo
generacional al cual pertenezco que
utiliza las herramientas a nuestro alcance para comunicarnos. Quisiera en esta
pequeña reflexión aclarar un poco del
poder de la red en la interacción social.
Hay que partir de que las TIC son
una herramienta tecnológica para hacer redes y alianzas que grupos en coordinación trabajan para
trasmitir información a través de internet. Esta trasferencia de información en el tiempo
se traduce en una experiencia colectiva que propicia el activismo en causas
sociales, culturales y políticas.
Experiencias nacionales como el
movimiento ocupa INSS y el movimiento 132 en México nacen de un cambio de
paradigma en las relaciones sociales, donde se demanda valores universales de
una ética moral inclusiva más allá de un protagonismo en las estructuras de Poder. Los tiempos donde
las demandas sociales en las calles, donde por ser antagónicas al sistema
político eran silenciadas, manipuladas o minimizadas por el encargado del poder
en turno están siendo traspasadas al ciber espacio. Estas vías alternas de
comunicación social y medios de información están penetrando en el quehacer
colectivo y están llamadas a ser una
forma de rebelión a la concentración de los medios tradicionales que muchos gobiernos contemplan para
perpetrarse en el poder.
Por mencionar una cifra que se
manejo ayer en las ponencias de cada 10 jóvenes
7 utilizan el ciberespacio en zonas urbanas para comunicarse e informarse y el universo
total de miembros en la red social más activa del país ya alcanzo los 10 millones de usuarios. Aunque
ciertamente en nuestro país la concentración de usuario de Internet se
centra en los círculos universitarios y profesionistas de entre 18 y 34 años
con una dependencia de los ordenadores, tabletas, teléfonos inteligentes en su
quehacer diario, este poder intangible de omnipresencia, donde el conocimiento,
la experiencia y estilo de vida son los activos más valorados han logrado a
través de las redes sociales articular
sus demandas en pro de los adultos mayores para hacerse escuchar por el gobierno.
Queda pendiente para empresas
tecnológicas y gobierno reducir la brecha digital para la
comunicación llegue a las zonas rurales y propicie el desarrollo económico. A
los sociólogos y expertos en mercadeo digital promover el uso de las TIC en las
organizaciones para el desarrollo de estrategias de mercadeo. ¿Por qué no hacer
llegar a las Pymes las competencias y el conocimiento técnico en mercadeo
digital como parte de una ventaja competitiva como palanca de desarrollo?
Económicamente estos mecanismos son accesibles y al alcance de todos.
Seoane Espínoza
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